Pequeños grandes detalles

A veces, el tiempo de ingreso en las UCINs y en Neonatología es muy largo, los procesos de recuperación de determinadas enfermedades necesitan mucho tiempo, los bebés muy prematuros, también, para madurar y desarrollarse.
El camino puede estar lleno de baches, de avances y retrocesos. Es una situación muy desesperante para las familias, el tiempo es eterno, su vida cotidiana se detiene, se interrumpe, y hay que adaptarse a un ritmo completamente diferente.
Ya hemos comentado en otras entradas, la importancia del acompañamiento y el apoyo emocional a estas familias.
Cada miembro del personal puede pensar qué puede ofrecer, además de la dosis extra de empatía y cariño que necesitan.
Podemos limitar nuestras acciones sólo a la obligación, y cumplir con nuestro deber.
Pero también podemos ir más allá, sin que nadie nos lo pida.
Hay muchas cosas que podemos enseñar a los padres: cómo dar un masaje a su bebé, cómo contenerle cuando se desorganiza, cómo calmarlo, cómo ayudarle a conciliar el sueño…
También hay compañeros con especiales habilidades: hay quien sabe hacer un lazo con un trozo de gasa, o una tarta con pañales, unos patucos con material desechable, un sonajero con un recipiente recolector de muestras y unos tapones de tubos de analítica… Hay quien sabe cantar, quien sabe estimular y hacer sonreír a un bebé, quien tiene unas manos especialmente delicadas que calman a los bebés…
Hemos tenido padres que han tenido que ausentarse y no han podido ver a su hijo en varios días. ¿Por qué no enviarles una foto del bebé y un cartel en su cuna comentando lo bien que sigue? ¡Ahora es tan fácil con la tecnología que tenemos!
En este blog, un padre nos muestra los momentos clave en la vida de su hijo prematuro. En las UCINs también hay pasos que superar, hitos y momentos clave: el primer “cumplemes”, el primer kilo, la primera toma al pecho, la retirada del respirador, de la sonda gástrica…algunos de esos momentos no deberían ni haber existido, otros querrían estar celebrándolos en su casa y no en el hospital, pero ocurren, y hay que celebrarlos. Y ¿por qué no hacerlo en la Unidad?
Los padres nos han transmitido lo mucho que les han gustado estos pequeños detalles, así que, animamos a todos los profesionales que tenemos el privilegio de trabajar en estas Unidades, a pensar qué puede hacer cada uno para facilitar el camino y aliviar el sufrimiento.
26 febrero, 2016 18:19|
Muchas gracias, esa tarta se la hicisteis a mi hijo, a Paquito, no os podéis imaginar que ilusión me hizo!!!!
27 febrero, 2016 19:13|
¡Siiii Consuelo, es la tarta de Paquito! Nuestra compañera Marisa y sus manos tan hábiles. ¡Nos alegra que te hiciera ilusión! Y gracias por permitirnos compartirla